Autoevaluación: aprende a evaluar tus progresos

Una autoevaluación es una herramienta poderosa que permite que tus compañeros de equipo reflexionen sobre su desempeño, actualicen sus objetivos y comuniquen sus expectativas.

Ya sea que se aproxime una evaluación de desempeño trimestral, semestral o anual, o que estés preparando el plan de Recursos Humanos de una empresa, contar con un proceso de autoevaluación será siempre de gran ayuda. La autoevaluación les permite entablar un diálogo reflexivo contigo durante la reunión de evaluación oficial en lugar de sentirse abrumados e inseguros con respecto a lo que puede suceder.

En este artículo, exploraremos el valor que la autoevaluación puede aportar a tu proceso de evaluación de desempeño, daremos ejemplos de cómo responder algunas de las preguntas más comunes y proporcionaremos una plantilla de autoevaluación gratuita que puedes usar durante tu próximo ciclo de evaluación del desempeño.

¿Qué es una autoevaluación?

Una autoevaluación es un método por el cuál el empleado evalúa el propio trabajo para comprender su progreso indivual, fortalezas y debilidades en el desempeño laboral. La autoevaluación permite al trabajador descubrir sus puntos fuertes y puntos débiles y es una herramienta eficaz para la mejora continua y el desarrollo profesional y plan de carrera.

Cuando comienzas el proceso de evaluación del desempeño con una autoevaluación, en realidad te estás haciendo un favor a ti mismo y también a tu equipo. El departamento de Recursos Humanos de una empresa debe contar siempre con esta herramienta porque además de ayudarte a comprender la manera en que tus compañeros de equipo ven sus propios logros, también les estás dando la oportunidad de reflexionar sobre su desempeño en lugar de simplemente decirles cómo les fue.

Coevaluación

Una herramienta también muy útil para la mejora del desempeño laboral y la toma de decisiones para el departamento de Recursos Humanos es la coevalucación. Una coevaluación es un proceso por el que un compañero evalúa a otro. De esta forma, no sólo se fomenta la comunicación entre los compañeros sino que la evaluación del desempeño no recae solo y eclusivamente en el manager. Los pasos para realizar una coevaluación son similares a los de una autoevaluación. Se deberán fijar primero los criterios de evaluación y, más tarde, los roles para cada miembro, de forma que se establezca un calendario en el que se fije quién evalúa a quién. Para que este proceso sea realmente eficaz, más tarde, se deberán compartir los resultados.

Beneficios del proceso de autoevaluación

Pero eso no es todo. Descubre los seis beneficios más poderosos de las autoevaluaciones:

Fomentan el crecimiento personal

Imagina dos escenarios: en el primero, le dices a tu compañero de equipo que sus habilidades para la resolución de problemas están por debajo del nivel satisfactorio y que necesita mejorarlas. En el segundo escenario, el miembro de tu equipo se da cuenta de que sus habilidades para resolución de problemas deben mejorar y, como beneficio adicional, él acude a ti por su cuenta para compartir ideas sobre cómo puede desarrollar esa habilidad. 

¿En qué escenario crees que tu compañero se sentiría más motivado? Probablemente en el segundo. Esto se debe a que el segundo escenario le da tiempo a los miembros de tu equipo para reflexionar sobre su desempeño y llegar a sus propias conclusiones. Por ejemplo, en un estudio de la Escuela de Negocios de Harvard se descubrió que la reflexión puede ayudar a las personas a desarrollar confianza en la capacidad de lograr una objetivo y puede influir en el desempeño general.

Las autoevaluaciones son la oportunidad perfecta para que tu equipo reflexione sobre el impacto que generan en la organización y cómo quieren seguir creciendo en su rol.

Aumentan la claridad con respecto a los roles y responsabilidades

La falta de claridad sobre los roles, sobre quién es el encargado de un aspecto específico y sobre el propósito de los entregables puede afectar de forma negativa el desempeño del equipo. Los roles y responsabilidades poco claros provocan que el trabajo se pase por alto, que haya falta de comunicación y, en el peor de los casos, que el trabajo se realice por duplicado. De hecho, el informe de la Anatomía del trabajo 2021 reveló que los trabajadores pierden más de 236 horas al año trabajando en tareas que ya se realizaron.

Una autoevaluación desafía a los miembros de tu equipo a reflexionar sobre sus roles y responsabilidades. Pueden usar esta herramienta para entender con claridad qué es lo que se espera de ellos, especialmente si hay instancias en las que no cumplen con las responsabilidades de su rol o cuando, por el contrario, tienden a excederse.

Incrementan la satisfacción de los empleados

Una forma segura de mejorar la satisfacción de los empleados es aumentar el compromiso. Los compañeros de equipo que sienten que están a cargo del crecimiento de su carrera, que saben de qué manera están aportando a la organización y que se sienten escuchados por sus gerentes, tienen más probabilidades de disfrutar su trabajo.

Al permitir que tu equipo se evalúe a sí mismo en lugar de simplemente expresar tus observaciones sobre ellos, les das la oportunidad de participar y contribuir de manera activa en lo que respecta a su felicidad general en el lugar de trabajo.

Proporcionan más información sobre el trabajo de tu equipo

Seamos realistas: normalmente, los directores, managers y headhunters no están involucrados en cada tarea y cada proyecto. Aunque conocen, a grandes rasgos, los logros de sus compañeros de equipo, por lo general no tienen conocimiento de todos los detalles. Tal vez no te diste cuenta de lo desafiante que fue cierta tarea o no advertiste lo orgulloso que se sintió un miembro del equipo al alcanzar un objetivo determinado.

Tus compañeros de equipo saben bien lo que han logrado durante el último período y pueden usar el formulario de autoevaluación para mostrar todo el trabajo que han realizado. Esto les da una mayor sensación de logro y te permite saber qué es lo que más los enorgullece. Es una situación en la que todos se benefician.

Potencian las habilidades comunicativas de tu equipo

¡Hablar de tus propios logros puede ser difícil! Y eso no es todo, sino que muchas autoevaluaciones requieren que tu equipo escriba sus logros y reflexione sobre el trabajo realizado en oraciones completas. Aprender a hacerlo es fundamental para tener conversaciones acerca del desarrollo profesional, redactar currículums y generar redes profesionales.

El proceso de autoevaluación desafiará a los miembros de tu equipo a mejorar sus habilidades de comunicación enseñándoles cómo transmitir de manera clara y precisa sus logros y metas por escrito. Además, darles a los miembros de tu equipo la oportunidad de hablar sobre estos logros y su progreso individual aumenta su confianza.

Generan confianza

El gestor que permite que los miembros de su equipo se evalúen a sí mismos, en lugar de lanzarles observaciones, está compartiendo la responsabilidad. La reunión individual que sigue a la autoevaluación es una oportunidad ideal para generar confianza. Dale a tu compañero de equipo la oportunidad de manejar el rumbo de la conversación. Pídele que explique las fortalezas, las áreas de oportunidad y las metas que incluyó en su autoevaluación. 

Es más probable que los miembros del equipo que desarrollan una relación de confianza con sus superiores directos se sientan apoyados, reflexionen sobre su trabajo y, a su vez, se desempeñen mejor en su trabajo.

6 ejemplos de autoevaluación y 6 tips

La parte más difícil de una autoevaluación es que tu equipo tiene que escribir sobre su propio desempeño en lugar de simplemente marcar casillas. Si bien esto brinda a los compañeros de equipo la oportunidad de mostrar su trabajo con más detalle y profundidad que otras evaluaciones, encontrar las palabras adecuadas también puede ser un desafío.

Ya sea que seas un gestor que escribe su propia autoevaluación o un colaborador individual que aborda este tipo de evaluación de desempeño por primera vez, estos son nuestros 6 consejos principales para redactar una excelente autoevaluación:

1. Sé honesto

Esto debería ser obvio, pero no describas tu rendimiento laboral de manera que parezca ser mejor o peor de lo que realmente es. Sé honesto contigo mismo y haz todo lo posible para encontrar un equilibrio saludable entre ser humilde y resaltar los logros de los que estás orgulloso.

• Lo que no debes hacer: Dirigí 13 webinars el año pasado que fueron un gran éxito.

• Lo que sí debes hacer: Dirigí 13 webinars el año pasado, la mayoría de los cuales contaron con mucha participación y conversación positivas. Sin embargo, noté que un área de oportunidad para mí es trabajar en facilitar preguntas cuando los participantes son tímidos. Estoy seguro de que puedo usar mis habilidades de liderazgo e inteligencia emocional para conectarme mejor con un público tímido y alentarlos a ser abiertos con sus preguntas.

2. Sé específico y preciso

Hay una razón por la que la mayoría de las plantillas de autoevaluación vienen con recuadros de texto de tamaño predeterminado. La idea no es que escribas una novela completa, pero tampoco quieres que tu gerente esté tratando de adivinar qué es lo que realmente quisiste decir. Antes de comenzar a escribir, piensa en lo que quieres decirle a tu gerente. Luego, concéntrate en ir al grano de la manera más rápida y precisa posible.

• Lo que no debes hacer: A mis compañeros les gusta trabajar conmigo.

• Lo que sí debes hacer: Sé cómo hacer que los miembros de mi equipo se sientan cómodos y bienvenidos. Me destaco en el trabajo colaborativo e interdisciplinario porque sé cuándo delegar, cómo brindar comentarios constructivos y de qué tareas encargarme para impulsar el éxito del equipo y del proyecto. 

3. Mantén una actitud positiva

Ya sea que hayas tenido un período insatisfactorio en el trabajo o simplemente seas muy crítico con tu trabajo, siempre expresa tu autoevaluación de una manera positiva y orientada a los objetivos. En lugar de castigarte por un objetivo no alcanzado, plantéalo como un nuevo objetivo u oportunidad para el próximo período.

Mantenerte positivo en tu autoevaluación le muestra a tu gerente que estás al tanto de tus oportunidades de crecimiento y que ya estás pensando en cómo alcanzar tus objetivos durante el próximo período.

• Lo que no debes hacer: No pude finalizar mi proyecto.

• Lo que sí debes hacer: Mi proyecto se topó con algunos obstáculos el año pasado debido a la escasez en nuestra cadena de suministro. Si bien no pude finalizar el proyecto, mi equipo y yo pudimos superar parcialmente la escasez de suministros al tercerizar el 30 % de nuestras necesidades de fabricación. Estoy seguro de que podemos respetar el cronograma modificado y lanzar nuestro producto en abril de este año.

4. Enumera ejemplos y logros medibles

Una autoevaluación es tu oportunidad de dar ejemplos específicos, tanto sobre tus logros como sobre las cosas en las que te quedaste corto. Cuantifica tus contribuciones siempre que sea posible. Esto también ayudará a tu gerente a hacer mejores preguntas durante la reunión de evaluación.

• Lo que no debes hacer: Gané muchos clientes nuevos para nuestro perfil durante el último trimestre.

• Lo que sí debes hacer: Contacté con 86 clientes potenciales el último trimestre, de los cuales 21 se convirtieron en nuevos clientes. El trimestre anterior solo convertí a 13 de 75 clientes potenciales, esto demuestra que he mejorado el volumen y la calidad de mis lanzamientos durante el último período.

5. Usa objetivos SMART

Una evaluación de desempeño no solo se compara con tu desempeño anterior, también es una oportunidad para establecer nuevas metas para el próximo período. Establece objetivos específicos, medibles, alcanzables, realistas y de duración limitada de manera que puedas consultar estas métricas cuando redactes tu autoevaluación para el próximo período de evaluación.

• Lo que no debes hacer: Quiero aumentar mis ventas.

• Lo que sí debes hacer: Para junio, aumentaré mis ventas en un 30 % ya que participaré en nuestras reuniones de ventas semanales donde compartimos nuevas estrategias, victorias y lecciones aprendidas.

 6. Sigue tus logros a lo largo del año

Finalmente, la autoevaluación te permitirá hacer un seguimiento mucho más fácil de los logros que alcanzaste durante el período que se evalúa. En lugar de esforzarte por anotar todos tus logros el día que estés redactando la autoevaluación, lleva una lista actualizada durante todo el período que se evalúa.

Si aún no lo has hecho, usa una herramienta de lista de tareas para dar seguimiento a todo aquello en lo que estás trabajando. Luego, cuando llegue la autoevaluación, simplemente haz clic en las tareas finalizadas o consulta los logros importantes para que sepas exactamente qué incluir en tu informe.

Cómo hacer una autoevaluación con plantilla y ejemplos

A continuación, se muestra un ejemplo completo de cómo podría ser una autoevaluación para un especialista en comunicaciones. Si eres gerente, puedes usar nuestra plantilla de evaluación en tu proceso de evaluación. Si se aproxima una autoevaluación, practica tus habilidades de reflexión y redacción con nuestra plantilla para que te sientas preparado cuando la verdadera evaluación llegue.

Puedes descargar una versión en blanco de esta plantilla de autoevaluación a continuación.

Puedes descargar una versión en blanco de esta plantilla de autoevaluación a continuación. 

Ejemplos de frases que te servirán de inspiración para tu autoevaluación

¿Estás experimentando el bloqueo del escritor? Usa esta plantilla de frases y completa los espacios en blanco:

“El último [período], pude [describe el logro] mediante [describe cómo lo hiciste]. [Explica con más detalle si corresponde]”.

Por ejemplo: El último trimestre, entregué todos mis proyectos a tiempo mejorando mis habilidades de gestión del tiempo mediante el uso de la técnica Pomodoro. También separé dos horas cada mañana en mi calendario para concentrarme en trabajar con mis emails y establecer metas para cada día.

Aquí hay otra plantilla de frases que puedes usar para establecer una meta para el próximo período de evaluación:

“Reflexionar sobre mi desempeño me ha demostrado que quiero trabajar en [describe el área de oportunidad]. Considero que mejorar [área de oportunidad] me ayudará a [motivo por el que deseas mejorar]. Mi objetivo es [describir el objetivo SMART]”.

Por ejemplo: Reflexionar sobre mi desempeño me ha demostrado que quiero trabajar en mi creatividad y sacar a mis diseños de mi zona de confort. Considero que mejorar mis habilidades para dibujar personas me ayudará a ampliar mi portafolio y a trabajar con una mayor variedad de clientes. Mi objetivo es pasar treinta minutos todos los días laborales dibujando personas y evaluar mi progreso con mi gerente durante nuestras reuniones individuales semanales para poder tener más confianza en esta habilidad para el próximo período de evaluación.

Establece objetivos, dales seguimiento y alcánzalos con Asana

Después de las autoevaluaciones, tus compañeros de equipo deberían comprender mejor sus oportunidades de crecimiento: ahora es el momento perfecto para que establezcan nuevos objetivos para ellos mismos. 

Usa el software para establecer objetivos de Asana para que tu equipo pueda definir y dar seguimiento a sus objetivos. Además de ver su progreso en tiempo real, también podrán revisar sus logros en Asana y completar su autoevaluación con absoluta certeza con respecto a lo que han logrado.